Reconsiderar un café

No sería necesaria la propuesta
si hubiese prueba alguna
de aquel cruce tímido y tonto
en la quimera de no poder
entender otra historia


Hay bares que tienen vista al río
y tazas grandes

Y si lo hacemos como al principio
sólo se trata de mostrar y no decir

La máquina de ego se paró
ahora está al control
de los trabajadores del sentimiento

Y si toda esta puesta en escena
fuese solo marketing pululero
la idea sería repetirte las pelotudeces
de gente que no va más allá
de Palermo o de Libertador
que puede,  pero no va a estos bares
ni a verte con el río


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