Rezo

Que nuestra tristeza se haga rabia

y que la rabia se haga tinta

que la tinta como la sangre

 roja, imponente e impactante

sólo abra heridas en la memoria
que la memoria se haga

consciencia y crítica

para desafiar a las quienes dan las noticias

que las noticias, "las más leídas"

 las den los que no tienen lugar, ni voz, ni rating
que si desaparecen, sean corporaciones

pero que antes nos devuelvan la humanidad

que la humanidad nos haga comunidad

 y que tenga una sola voz,

 unida en millones de cuerdas vocales

que griten contra el facismo

 y todos sus derivados de los medios de comunicación

 que lo exilien del país, del mundo y de la ignorancia

 dónde nace y se alimenta el odio.
El odio que estoy leyendo, en un muro

cómo de Berlín

la opinión propinada por los de los privilegios

peligrosos y siniestros para los que leen poco

 o no leen, ni preguntan, por el, ni por nadie

con excepción de que algún titular se los sugiera

Pero que el odio se vuelva rabia, y se contagie paranoica con escopetazos en los lomos negritos de tus futuros punzantes pungas, y que les pese, que les duela tu pésame al despedirlos, que se mueran lentamente y se revuelquen en sus cartones y que el diablo les arranque los piercings con sus uñas sucias llenas de poxyran sin esmalte, mientras terminas de purificarte con la ante última pelotita del rosario en tus manos. Que el odio se vuelva tristeza, porque ya no se lee, los libros verdaderos, los escritos independientes, como en farenheit, arden al sol en las vidrieras y las paredes están amordazadas por publicidades que hacen quedar mal al graffiti, que no se da cuenta que queda feo y le da cáncer a la señora ya tiene artritis de tanto enojarse. Que el odio se transforme en tristeza, porque por facebook no podés cambiar a nadie. Que nos demos cuenta, de que estamos tristes, porque nos venden algo que nunca podríamos tener, en este sistema.